Utiliza tecnologías digitales para informar a los estudiantes sobre aspectos específicos

Lectura

Foto de Olu Eletu en Unsplash

La retroalimentación es una parte esencial del aprendizaje eficaz: ayuda a los estudiantes a comprender el tema que están estudiando y les da una orientación clara sobre cómo pueden mejorar su método de aprendizaje. Bellon et al. indican que «se ha observado de forma clara y consistente que la retroalimentación en un contexto académico está más relacionada con los logros que cualquier otra conducta pedagógica […]. Esta relación resulta consistente en cualquier nivel educativo y socioeconómico, raza o entorno escolar».

Según Phil Race, uno de los autores más citados en este campo, la retroalimentación debe ser:

  • Puntual-cuanto antes, mejor. Se han realizado numerosas investigaciones sobre cuánto tiempo pasa desde que termina una formación hasta que se deterioran los efectos de la retroalimentación de forma significativa. Idealmente, la retroalimentación debe proporcionarse en el plazo de uno o dos días y, aún mejor, inmediatamente después, tal y como se puede hacer, por ejemplo, en algunas situaciones de aprendizaje asistido por ordenador y también en ciertos contextos presenciales.
  • Confidencial e individual. La retroalimentación debe ser acorde con los logros, el carácter individual y la personalidad de cada estudiante. Los métodos indiferenciados de recopilar y distribuir información pueden reducir la sensación de valor que perciben los estudiantes respecto a la retroalimentación que reciben, incluso cuando se aumenta la calidad y cantidad de información. Todos los estudiantes siguen siendo personas.
  • Estimulante. Si la retroalimentación está diseñada para fortalecer y consolidar el aprendizaje tenemos que asegurarnos de que no reduce el valor formativo. Por supuesto, es más fácil asegurarse de ello cuando la retroalimentación es positiva pero tenemos que analizar cuidadosamente cuál es la mejor forma en la que podemos ofrecer retroalimentación a los estudiantes que, al mismo tiempo, sea crítica y estimulante. No hay que olvidar que, a menudo, la retroalimentación se da y se recibe en un sistema en el que se otorga más poder a la persona que la proporciona respecto a quien la recibe (por ejemplo, cuando estamos manejando sistemas de evaluación).
  • La retroalimentación debe abrir puertas, no cerrarlas. En este sentido, tenemos que elegir con mucho cuidado las palabras que usamos al dar la retroalimentación a los estudiantes. No cabe duda de que algunas palabras como «deficiente» o «insuficiente» pueder resultar taxativas y provocar grietas insalvables en la comunicación entre asesor y estudiante. En menor medida, incluso algunas palabras positivas como «excelente» pueden causar problemas cuando, en la siguiente retroalimentación, se encuentran con un simple «muy bien»-¿Por qué no ha sido excelente esta vez? En todos estos casos, es mejor alabar los aspectos concretos que se consideran muy buenos o excelentes con un poco más de detalle, en lugar optar por el camino fácil de usar los adjetivos sin más.
  • Manejable. Esta característica tiene dos caras. Desde nuestro punto de vista, diseñar y ofrecer retroalimentación a los estudiantes podría consumir sin darnos cuenta todo nuestro tiempo y energía, es una tarea interminable. Pero, también desde el punto de vista de los estudiantes, recibir demasiada puede hacer que no sean capaces de distinguir lo importante de lo rutinario, reduciendo así las posibilidades de aprovechar la información que más falta les hace.

Este artículo muestra la importancia del feedback constructivo para el e-learning (tiempo de lectura esperado: 5 minutos).

Vídeo

Para obtener una introducción acerca de las posibilidades de retroalimentación de los alumnos que ofrecen las tecnologías digitales, mira este vídeo de la Facultad de Educación de Illinois. (duración: 7:16 minutos)

En este vídeo producido por el Gabinete de Tele-Educación de la Universidad Politécnica de Madrid puedes ver una introducción sobre las posibilidades que las tecnologías digitales ofrecen para establecer sistemas de retroalimentación con los estudiantes. (duración: 3:55 minutos)

Para obtener consejos prácticos sobre cómo trabajar los sistemas de retroalimentación con los estudiantes, mira este vídeo. (duración: 6:03 minutos)

Práctica

(tiempo esperado para completar la tarea: 1 hora)

Elige una actividad didáctica de tu curso, para cuya evaluación sea necesario aportar comentarios discursivos.

Utilizando los consejos que hemos compartido más arriba, y suponiendo que vas a emplear la retroalimentación entre pares, crea un conjunto de instrucciones para los estudiantes explicando cómo proporcionar dicha retroalimentación, incluyendo:

  • principios generales para dar retroalimentación
  • tecnología y herramientas que se deben emplear
  • formato de la retroalimentación
  • carácter de la retroalimentación, es decir, determinar los campos sobre los que se debe proporcionar retroalimentación, como por ejemplo sobre el uso de lenguaje técnico, la precisión o el dominio del tema

Comparte las instrucciones mediante un artículo en el  EduHack Wall.

Recursos adicionales

  • Estos dos artículos (1), (2) ofrecen una serie de consejos generales para profesores sobre cómo ofrecer retroalimentación efectiva y útil a los estudiantes.
  • A menudo, los cursos de e-learning también pueden utilizar retroalimentación entre pares, con lo que los estudiantes revisan y puntúan el trabajo de los demás.
  • Este artículo de la Universidad de Cádiz presenta los aspectos básicos de esta técnica.